Gobernanza
de conformidad con las leyes y directivas

Recurrimos a un Compliance Management System con el fin de facilitar que todos nuestros empleados interactúen siempre debidamente con nuestros clientes y que, al hacerlo, les transmitan la cultura tan particular que tenemos en IVU.

El sistema incluye diversas medidas y procesos destinados a garantizar el cumplimiento de las normas y leyes nacionales e internacionales por parte de toda la plantilla, así como a facilitar su seguimiento. Entre ellos destacan, entre otros, un Código de conducta vinculante y un sistema de denuncia de irregularidades de acceso público.

Nuestro responsable de Compliance se encarga de supervisar el cumplimiento de las normativas aplicables. Y, con el fin de identificar y controlar todos los riesgos, en IVU hemos implementado un sistema de gestión de riesgos.

Más información (en inglés)

Con nuestro Código de conducta remarcamos aquello que IVU defiende, tanto internamente como de cara al exterior. Asimismo, sirve para establecer un marco de actuación para nuestras actividades diarias del que servirnos para tomar siempre decisiones éticas y con arreglo a la legislación vigente. El Código de conducta garantiza a nuestros clientes, socios y accionistas, así como al público en general, una colaboración transparente y fiable con nosotros.

En IVU no aceptamos la corrupción ni el soborno en ninguna de sus formas (sea en el ámbito público o privado, de forma activa o pasiva). Como empresa consciente de su responsabilidad y que opera a escala internacional, observamos las leyes y disposiciones aplicables en materia de anticorrupción en todos los países en los que desarrollamos alguna actividad.

Actuamos con arreglo a lo establecido y de conformidad con las leyes antimonopolio y de protección de la competencia. No aprovechamos nuestra posición de mercado ni llegamos a acuerdos con la competencia en detrimento de los clientes o posibles clientes.

Para garantizar el respeto y la protección de los derechos humanos en la cadena de suministro, nos adherimos a la Ley alemana sobre la debida diligencia corporativa en las cadenas de suministro (LkSG, por sus siglas en alemán) y en estos momentos estamos trabajando en la incorporación de otras medidas. Todos nuestros proveedores y socios tienen su sede casi exclusivamente en Europa. Además, no tenemos áreas de operaciones en países con un alto riesgo de violación de los derechos humanos, ni recurrimos a proveedores directos con un alto riesgo de vulneración de dichos derechos.